En el salón de actos de la Escuela de Hostelería de Jerez, tuvo lugar en la tarde-noche de ayer la presentación de El ojo y el tiempo, último libro, por el momento, de Dolors Alberola.
Intervino en primer lugar el poeta Mauricio Gil Cano, quien, tras presentar a los miembros de la mesa, dio la palabra a Domingo F. Faílde, encargado de explicar a los asistentes las claves poéticas del libro.
Faílde –cuyo texto íntegro se publica en la columna de la derecha- se refirió al símbolo del ojo y sus connotaciones filosóficas, punto de partida, según él, de este libro, al que definió como un canto de amor a la creación artística.
A continuación, sonó la música que dos músicos eminentes, Ángel Hortas y Pablo Paniagua, aportaron a un acto que, en todo momento, estuvo presidido por la más exquisita belleza. A partir de este instante, las selectas partituras interpretadas por ambos se trenzaron con los poemas de Dolors Alberola, creando una atmósfera estética que subyugó al auditorio.
Por último, tras la firma de ejemplares por la autora, se sirvió un vino de honor.
Intervino en primer lugar el poeta Mauricio Gil Cano, quien, tras presentar a los miembros de la mesa, dio la palabra a Domingo F. Faílde, encargado de explicar a los asistentes las claves poéticas del libro.
Faílde –cuyo texto íntegro se publica en la columna de la derecha- se refirió al símbolo del ojo y sus connotaciones filosóficas, punto de partida, según él, de este libro, al que definió como un canto de amor a la creación artística.
A continuación, sonó la música que dos músicos eminentes, Ángel Hortas y Pablo Paniagua, aportaron a un acto que, en todo momento, estuvo presidido por la más exquisita belleza. A partir de este instante, las selectas partituras interpretadas por ambos se trenzaron con los poemas de Dolors Alberola, creando una atmósfera estética que subyugó al auditorio.
Por último, tras la firma de ejemplares por la autora, se sirvió un vino de honor.